🔮 Muchos de nosotros estamos muy acostumbrados a lo que se conoce como “motivación por deficiencia”: mi teléfono móvil aún está en buen estado, pero ahora ha salido la última generación de esta marca que todo el mundo tiene y está claro que no puedo estar sin él.
🔮 Son muchas las cosas que nos faltan. Puede que no tengas una casa con grandes comodidades. Es posible que tu cuerpo no sea el ideal y que tu pareja tenga sus defectos. Hasta cabe la posibilidad de que aún no hayas podido ir de vacaciones a ese destino paradisíaco, mientras que tus amigos, fueron el verano pasado. Vivir en la economía de la carencia es como un virus, como una enfermedad imparable que poco a poco, se extiende como la mancha de una humedad en una pared. Siempre está ahí, con su apariencia desagradable.
1️⃣ Alejémonos del lugar que nos da este enfoque mental. Focalizar nuestra existencia en exclusiva hacia la esfera de lo material es una fuente inagotable de malestar. Nunca nos veremos satisfechos.
2️⃣ Cambia el enfoque de tu mirada mental. Oriéntala hacia lo que ya tienes para percibir dónde se concentran tus fortalezas reales, tus auténticas bellezas y tu abundancia.
🔮 Desarrollemos un estado de conciencia capaz de abrazarse a lo positivo, a lo presente y a lo concreto. No a lo que no está, a lo que no existe o a lo que falta. Solo cuando seamos capaces de agradecer lo que somos, lo que nos define y lo que nos envuelve en plena confianza, podremos abrir las puertas a la prosperidad. – Valeria Sabater. La Mente es Maravillosa –